alfre on Nostr: En Enero de 1994 los Cypherpunks llevaban un año y medio activos, y Phil Zimmermann ...
En Enero de 1994 los Cypherpunks llevaban un año y medio activos, y Phil Zimmermann ya estaba siendo investigado por la distribución de PGP.
Recién iniciado 1994, Hal escribió esto:
De: Hal
Fecha: Dom, 2 Ene 94 10:58:40 PST
Para: cypherpunks
Asunto: POLI: Politics vs Technology
Cita de mail de Mike Ingle:
“¿Podría el gobierno prohibir un libro hoy? Por supuesto que no, al menos no después de que una persona lo haya tecleado o escaneado en un ordenador. Los avances tecnológicos son permanentes. El enfoque político sólo es útil como arma táctica, para retenerlos hasta que las soluciones tecnológicas estén listas. Si quieres cambiar el mundo, no protestes. Escribe código.”
Esta postura parece estar convirtiéndose rápidamente en el dogma de los cypherpunks, pero no estoy de acuerdo. La idea de que podemos simplemente desvanecernos en el ciberespacio e ignorar las desagradables realidades políticas es poco realista, en mi opinión.
¿Se ha olvidado la gente de la propuesta de Clipper Chip y de su posible continuación ilegalizando todo cifrado que no sea key escrow como Clipper? Si estas propuestas son derrotadas ahora o en el futuro será gracias a maniobras políticas, no tecnológicas.
¿Se ha olvidado la gente de la investigación sobre la exportación de PGP? Phil Zimmermann no. Él y otros pueden enfrentarse a la posibilidad de diez años de prisión si son declarados culpables de exportación ilegal. Si alguien tiene alguna sugerencia sobre cómo escapar de la cárcel al ciberespacio, me gustaría conocerla.
SecureDrive de Mike es un programa estupendo para proteger la privacidad. Pero si queremos mantener las claves en secreto frente a investigaciones por motivos políticos, tenemos que confiar en la Quinta Enmienda, que es muy política y no tecnológica (una enmienda que Mike Godwin, de la EFF, y otros sostienen que no protege realmente la revelación de claves criptográficas). Una vez más, necesitamos victorias políticas, no tecnológicas, para proteger nuestra privacidad.
Incluso cuestiono el punto de Mike sobre la incapacidad del gobierno para prohibir libros. Fíjate en la dificultad de mantener PGP disponible en este país aunque sea legal. No sólo los sitios FTP han sido constantemente cerrados, sino también los servidores de claves. Y se trata de software legal.
Claro, este software está actualmente disponible en el extranjero, pero eso es porque las únicas limitaciones legales de PGP son los problemas de patentes de EE.UU.. Imagínate como podría empeorar la cosa si el cifrado sin key escrow (permiso a terceros para descifrar la información) fuera ilegal en una amplia gama de países y estos aplicasen límites estrictos en el acceso a la red con países que promueven el software ilegal. Una vez más, este tipo de decisiones se tomarán en el ámbito político.
Fundamentalmente, creo que tendremos el tipo de sociedad que la mayoría de la gente desea. Si queremos libertad y privacidad, debemos convencer a los demás de que merece la pena tenerlas. No hay atajos. Retirarse a la tecnología es como liarse la manta a la cabeza. Sienta bien durante un tiempo, hasta que la realidad te alcanza. La próxima propuesta de Clipper o de telefonía digital supondrá un duro despertar.
Hal Finney
Recién iniciado 1994, Hal escribió esto:
De: Hal
Fecha: Dom, 2 Ene 94 10:58:40 PST
Para: cypherpunks
Asunto: POLI: Politics vs Technology
Cita de mail de Mike Ingle:
“¿Podría el gobierno prohibir un libro hoy? Por supuesto que no, al menos no después de que una persona lo haya tecleado o escaneado en un ordenador. Los avances tecnológicos son permanentes. El enfoque político sólo es útil como arma táctica, para retenerlos hasta que las soluciones tecnológicas estén listas. Si quieres cambiar el mundo, no protestes. Escribe código.”
Esta postura parece estar convirtiéndose rápidamente en el dogma de los cypherpunks, pero no estoy de acuerdo. La idea de que podemos simplemente desvanecernos en el ciberespacio e ignorar las desagradables realidades políticas es poco realista, en mi opinión.
¿Se ha olvidado la gente de la propuesta de Clipper Chip y de su posible continuación ilegalizando todo cifrado que no sea key escrow como Clipper? Si estas propuestas son derrotadas ahora o en el futuro será gracias a maniobras políticas, no tecnológicas.
¿Se ha olvidado la gente de la investigación sobre la exportación de PGP? Phil Zimmermann no. Él y otros pueden enfrentarse a la posibilidad de diez años de prisión si son declarados culpables de exportación ilegal. Si alguien tiene alguna sugerencia sobre cómo escapar de la cárcel al ciberespacio, me gustaría conocerla.
SecureDrive de Mike es un programa estupendo para proteger la privacidad. Pero si queremos mantener las claves en secreto frente a investigaciones por motivos políticos, tenemos que confiar en la Quinta Enmienda, que es muy política y no tecnológica (una enmienda que Mike Godwin, de la EFF, y otros sostienen que no protege realmente la revelación de claves criptográficas). Una vez más, necesitamos victorias políticas, no tecnológicas, para proteger nuestra privacidad.
Incluso cuestiono el punto de Mike sobre la incapacidad del gobierno para prohibir libros. Fíjate en la dificultad de mantener PGP disponible en este país aunque sea legal. No sólo los sitios FTP han sido constantemente cerrados, sino también los servidores de claves. Y se trata de software legal.
Claro, este software está actualmente disponible en el extranjero, pero eso es porque las únicas limitaciones legales de PGP son los problemas de patentes de EE.UU.. Imagínate como podría empeorar la cosa si el cifrado sin key escrow (permiso a terceros para descifrar la información) fuera ilegal en una amplia gama de países y estos aplicasen límites estrictos en el acceso a la red con países que promueven el software ilegal. Una vez más, este tipo de decisiones se tomarán en el ámbito político.
Fundamentalmente, creo que tendremos el tipo de sociedad que la mayoría de la gente desea. Si queremos libertad y privacidad, debemos convencer a los demás de que merece la pena tenerlas. No hay atajos. Retirarse a la tecnología es como liarse la manta a la cabeza. Sienta bien durante un tiempo, hasta que la realidad te alcanza. La próxima propuesta de Clipper o de telefonía digital supondrá un duro despertar.
Hal Finney